Raul e Ileamar se encontraron en la iglesia, participaron en el mismo grupo de jóvenes y empezaron como amigos. Ambos se sintieron atraídos por sus personalidades y carismas mutuos, complementándose y fortaleciendo su relación con Dios. Nos complace invitarlos a este día tan significativo para nosotros y compartir un momento agradable con nuestras familias y amigos más cercanos.